Todos lo vieron recorriendo las calles Hurlingham juntando tapitas de gaseosas para donarlas al Hospital Garraham. Las juntaba por miles. Algunos lo ayudaban.
Fabián Emanuel, muchos lo llamaban “El Tapitero”, el que quería ayudar a todos y a todos les sonreía y con todos conversaba. Más de 10 años juntando tapitas, miles y miles, en una tarea solidaria llena de simpleza y de bondad.
Una leucemia terminó con su vida. Falleció el pasado 12 de diciembre. Todos lo recordarán como un hombre demasiado bueno.
Foto: gentileza Revista Hurlingham CasaxCasa
Era mi abuelo era el más bueno del mundo