La low cost que explota el aeropuerto comercial instalado en la base militar de El Palomar tiene serios inconvenientes para prestar el servicio además de las denuncias realizadas por los vecinos del lugar.
Cuando se levantó por completo la medida cautelar que regía sobre el polémico aeropuerto de El Palomar, desde Flybondi afirmaron que ello les permitiría normalizar sus operaciones y terminar con el registro de cancelaciones, suspensiones y pasajeros varados. Sin embargo la realidad indica lo contrario, los problemas continúan y sus clientes lo padecen además de los vecinos que rodean la zona afectada por el funcionamiento de la terminal aérea.
Tanto el viernes 4 como el sábado 5, el domingo 6 y el miércoles 9, más de cuatro mil pasajeros de la empresa vinculada al vicejefe de Gabinete de la Nación, Mario Quintana, padecieron la cancelación de 21 vuelos. Los mismos venían y a su vez de dirigían desde Córdoba, Bariloche, Jujuy, Corrientes, Tucumán y Mendoza.
Particularmente, el vuelo que partía desde Jujuy el sábado por la mañana recién pudo salir el domingo a la noche y por Aerolíneas Argentinas. Ese día, el avión de Flybondi no pudo volar pese a varios intentos ya que aparentemente tenía fallas no especificadas.
Según trascendió, los pasajeros perjudicados se acercaron al mostrador de la aerolínea para insultar a la empresa en medio de llantos de niños en brazos de sus madres cansados de estar en el aeropuerto jujeño.
Recordemos que a pesar del récord de las cancelaciones, suspensiones, fallas, incidentes y miles de pasajeros a los que dejó varados, hasta el momento no recibió ni una sola sanción por parte del ente estatal que debe cumplir esa función de control, la ANAC.