TACSA: «Una industria que fue un sueño y hoy es una empresa líder»

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Por Rómulo Brunetti.

TACSA – Tecnología Argentina en Cintas S.A. es una empresa de Hurlingham,con 30 años de trayectoria, líder en la Argentina en la fabricación y comercialización de cintas aisladoras. Su director, Ariel Matiazzo habla sobre la actualidad de su empresa.

En una de las entradas Hurlingham, en la zona que se conoce como la Triple Frontera (Morón-Tres de Febrero y Hurlingham) se encuentra TACSA (Tecnología Argentina en Cintas Sociedad Anónima).

Uno de sus directores e hijo del fundador, Ariel Matiazzo explicó el origen de esta industria, que es líder en el país en su principal producto- la cinta aisladora- y contó cuáles son los proyectos para la región y para su vector exportador.

Ariel Matiazzo se define como uno más de los 71 empleados de la empresa y explica que de ese número total solo 4 -entre ellos él- son gerentes y directivos, cerca de 20 se encargan de tareas administrativas, en tanto el resto son operarios distribuidos en turnos en el total de las 24 horas que trabaja la fábrica.

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TACSA es sinónimo de cintas aisladoras de PVC y cintas de caucho autosoldable, los dos principales productos que comercializan. De hecho nació con ese sueño, producir este producto en el país ya que se exportaba en su totalidad de otros países, principalmente de Japón. No sólo logró producirlo y quedarse- desde el 2003- con el 64 % del mercado en Argentina (el resto lo abastecen dos empresas de afuera) sino que además lo hizo con máquinas y equipamiento que también fueron diseñados en la propia empresa.

«Fue un desafío que arrancó como un sueño, se transformó en una obsesión y luego se hizo realidad»-asegura Matiazzo.

En la actualidad la fábrica se encuentra ampliando un playón donde se realizan muchas maniobras con los autoelevadores para abastecer materia prima al área productiva. Al mismo tiempo se encuentran sumando metros al sector de stock porque TACSA incorporó nuevos productos a su portafolio que deben tener un lugar de guardado apropiado.

El crecimiento de la empresa en los últimos tiempos se debe a que aumentaron un 50 % la exportación hacia Brasil.

Matiazzo explica que los vaivenes en la economía, no solo del país sino de Latinoamérica, hacen que en algunos momentos el porcentaje de la exportación varíe notablemente con respecto a las ventas en el país. En el caso de TACSA, luego de la crisis profunda del 2001, la empresa exportaba el 70 % de lo que producía porque el mercado interno estaba profundamente deprimido. Más tarde, con la recuperación del país sumada a la incorporación de nuevos productos se logró cambiar la proporción y se destinó el 80 % al consumo local y solo el 20 % a la exportación. Sin embargo el empresario asegura que «Siempre intentamos mantener con muchísimo esfuerzo la exportación porque creemos que es estratégica para nuestro producto y nuestra compañía». Es que no solo se busca colocar productos en el exterior para obtener divisas sino también para exigirse a sí mismo como empresa los estándares de calidad que se busca en el resto del mundo. Con esta performance llegan a Brasil y otros países como Chile, Paraguay, Bolivia, Uruguay, Venezuela, Colombia y también a Grecia.

A sus dos productos «vedette» TACSA fue incorporando, haciendo inteligencia de mercado, que no es otra cosa que tener un fuerte diálogo con los clientes para identificar cuáles son las necesidades insatisfechas de los usuarios, otros productos como precintos plásticos, tarugos y tornillos, tubos termocontraibles, cintas de papel, de empaque, doble faz, de teflón, etc.

 

 

LA IMPORTANCIA DE LA UNIÓN INDUSTRIAL DE HURLINGHAM

TACSA se unió a la flamante Unión Industrial de Hurlingham. Ariel Matiazzo (foto) es el vicepresidente de la entidad y Matías Matiazzo es uno de los vocales. «Me pareció interesante la conformación de la UIH porque entiendo que las dificultades y los procesos de una industria no necesariamente son los mismos que los de un comercio que tienen otras realidades, otras dificultades que sortear»- asegura Ariel Matiazzo al tiempo que destacó la idea de «trabajar con otros industriales de la zona, formar este nuevo grupo y poder así, elaborar soluciones comunes a dificultades comunes».

Para Matiazzo es muy valiosa la idea de generar nexos con la Municipalidad y con las entidades educativas de la ciudad y trabajar en prácticas profesionalizantes para que los chicos que están terminando el secundario tengan una oportunidad.

Por último consideró también que es sumamente provechoso trabajar en el tema del financiamiento pyme para lo cual tiene proyectado que la UIH dicte un seminario enfocado no sólo en los conocimientos sobre las herramientas de financiamiento y cómo aprovecharlas sino también en formas de maximizar el potencial exportador de las industrias de la zona para trabajar en conjunto con la Fundación Exportar, que lograr la colocación de productos locales en los países de la región.

 

 

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