Oscar Casas fue el primer Director de Entidades de Bien Público de la Municipalidad de Hurlingham, en la gestión de Juan José Álvarez como intendente. Después de mucho tiempo volvió a ese cargo durante el último año. Hace poco menos de un mes, fue uno de los directores que decidieron renunciar a la gestión de Luis Acuña y retornar al Frente para la Victoria. En esta nota, realizada en Radio al Día (FM Blog 94.1), Casas explica las razones y opina sobre la situación política del distrito.
-¿Cuál es la razón principal de la renuncia?
-Nosotros hemos participado de la creación de este municipio, y la verdad es que siempre trabajamos con la gente, a favor de la gente y hoy me encuentro con un municipio que está un paso atrás, se aleja todos los días de los vecinos. El municipio no le da respuestas a la gente. Cualquier reclamo choca con una pared. Esa pared y esa falta de respuesta vienen de la secretaria privada, o sea, viene del intendente y me parece que se hace muy difícil trabajar de esta forma.
-¿Y estas cosas no se plantean en las reuniones de gabinete?
-Yo estuve un año en esta etapa de la Municipalidad, y cuando al tercer mes de trabajo vi que no había ninguna reunión de gabinete le digo a Acuña “intendente deberíamos hacer reuniones de gabinete” y él me dijo “bueno, armala”, y la armé yo siendo un director, se juntaron en mi oficina todos los funcionarios para nada. Yo hice un planteo de mejorar la relación con la Secretaría Privada, de mejorar la comunicación con él. Fui el único que hizo ese planteo, con buena onda, con ganas de sumar soluciones y él me dijo delante de todos, que necesitaba un Secretario de Gobierno que atendiera el teléfono y yo, como ya estábamos distendidos y era tarde, le dije “Luis, vos lo que necesitas es un sirviente” y se enojó un poco conmigo, pero vos no podés tener un gobierno municipal sin tener relación directa, por lo menos una vez al mes, con tus funcionarios. Es imposible gestionar de esa forma.
-En los últimos veinte años, como funcionario o como militante político, tuviste relación directa con las diferentes entidades, clubes, sociedades de fomento, los centros de jubilados. ¿Cómo están en la actualidad las entidades de bien público en Hurlingham?
-En realidad quiero contar primero como llego yo al área de entidades de bien público. En una reunión de entidades donde participé como vecino de mi barrio me encuentro con el intendente y me pregunta que estoy haciendo y le cuento que en realidad no estaba haciendo nada en Hurlingham y me propone que le dé una mano y me dice que quiere trabajar con las entidades, me dijo “quiero recuperar mi relación con ellos, que están un poco caídas”, y la verdad que lo pensé y dije bueno, siempre es buena la posibilidad de trabajar con las entidades, y me encontré con un área con una sola persona, un administrativo, no había veedores, no había personas que fueran a recabar información ni a recorrer las instituciones. Pude mejorar eso, armé un equipo de trabajo y empezamos a visitar todas las instituciones, y en un año pudimos regularizar unas cien instituciones, y hay muchas más trabajando de manera irregular, pero no es solo responsabilidad de las entidades, es el Estado que está ausente y yo en el municipio era el primero en darme cuenta en que no hay voluntad de estar presente.
-Y es ahí donde decidís renunciar… ¿y por qué el regreso al Frente para la Victoria?
-Por lo mismo. El hecho de que esté hoy acompañando este proyecto que encabeza el concejal Juan Zabaleta tiene que ver con eso. Yo trabaja hasta muy tarde, nunca trabaje hasta solamente las 3 de la tarde, en realidad yo llegaba a las 10 u 11 de la noche a mi casa porque a la tarde era justamente cuando iba a las instituciones. Y yo veía que los compañeros que hacen política en el distrito, que están en la calle, son los concejales del Frente para la Victoria, con Zabaleta a la cabeza; traen soluciones y gestionan, escuchan a los vecinos y dan respuestas concretas y solucionan los problemas específicos del área que yo tenía, y entonces me preguntaba cómo puede ser que desde la política haya soluciones y el Estado municipal esté ausente. No es tan complicado, si una Sociedad de Fomento o un club te piden colaboración para un cierre de año de fútbol por ejemplo, o te pide un sonido o un escenario, se lo tenés que brindar. Yo soy un militante político, y milito para que la gente esté bien, que esté mejor, que se sienta contenida, y eso hoy en el Municipio no se puede hacer.