Una vez finalizada la sesión, volvieron a ocurrir incidentes y disturbios. El concejal Lautaro Aragón sufrió agresiones y amenazas por parte de un sujeto que meses atrás había agredido a golpes de puño a un vecino que presenciaba la sesión a la que habían asistido docentes del distrito. «Dejan que sigan ingresando matones a sueldo que después protagonizan incidentes al final de la sesión. Es inadmisible este tipo de conductas, al salir este señor comenzó a insultarme, amenazarme de muerte y hasta me escupió el rostro”, exclamó Aragón.
En el mismo sentido se expresó a través de u comunicado el secretario General Partido Socialista de Hurlingham, Hernán Quiñones quien se manifestó preocupado por el permanente acoso y agresión de personas no identificadas y que tienen vía libre para entrar al órgano legislativo municipal: «El lamentable hecho ocurre en un marco de tensión repetido en la institución donde evidentemente no se garantiza la seguridad de los vecinos ni de los concejales».
Por su parte Aragón afirmó desconocer al sujeto, pero se trataría de un personaje recurrente del Concejo que ya habría amenazado a vecinos en sesiones anteriores: “No sabemos siquiera el nombre de este sujeto pero debería constar en los registros de asistentes a las sesiones”.
La denuncia por amenazas fue radicada en la comisaría 5ta de Hurlingham, según informó Hernán Quiñones, Secretario General Partido Socialista de Hurlingham.
Cabe destacar que el oficialismo se negó a tratar un proyecto presentado por el edil socialista mediante el cual se reglamentaba la presencia de las personas dentro del recinto, con una credencial con número de legajo, en el caso de que fueran trabajadores del Concejo Deliberante.