Tras un convenio, la Municipalidad de Hurlingham brindará diversas propuestas culturales en el viejo teatro del Cosmopolita, una vez que el edificio sea recuperado.
A fin de año el Cosmopolita cumple 119 años. Creado como Sociedad de Fomento y Socorros Mutuos Cosmopolita, el 30 de diciembre de 1897 es uno de los lugares de mayor valor histórico del distrito.
En los 90 se formó el Centro de Jubilados y Pensionados, «Cosmopolita» y ahora el intendente Juan Zabaleta firmó un contrato de comodato con esa entidad, para que el Municipio de Hurlingham brinde en los espacios conocidos como «El Teatro» y «El Playón» o «El Patio», diferentes propuestas culturales para los vecinos.
El acuerdo fue firmado con la presidenta del Centro, María Ana Aveiro y ratificado en una Asamblea General Ordinaria que celebró la institución.
El Secretario General, Pablo del Valle, fue uno de los impulsores de ese convenio que nació a partir del pedido de los vecinos de la zona para que se manifestaron preocupados por el estado de abandono del lugar. «Queremos recuperar el Cosmopolita, la primera institución creada por vecinos de Hurlingham. Es una enorme oportunidad de empezar a construir el futuro desde el orgullo de lo que fuimos capaces de ser. Eso queremos: una ciudad de la que los vecinos sientan orgullo» resaltó Del Valle quien prometió «comenzar a trabajar para devolverle al club el brillo que una vez supo tener; para que las generaciones del presente y del futuro puedan disfrutarlo tanto, como hace años lo hicieron nuestros padres y abuelos».
La entidad nació el 30 de diciembre de 1897, no en el edificio que hoy conocemos, sino en un local del Molino harinero de Bancalari, aquel que se señala como lugar emblemático y fundacional de Hurlingham. El Cosmopolita está en el edificio actual, ubicado sobre la calle Güemes 1645, (atrás de la Iglesia de Hurlingham), desde setiembre de 1917. A lo largo del tiempo esa sede fue mucho más que en un edificio tradicional de la ciudad. Fue el escenario de los primeros pasos de progreso. Fue la cuna del Hospital de Hurlingham y sus instalaciones sirvieron como aulas de la primera escuela estatal de nivel medio de la ciudad, por ejemplo.
En los espacios que ahora estarán a cargo de la comuna se vivieron momentos muy importantes de la historia de Hurlingham. En el teatro que debe ser restaurado, funcionó hasta mediados del siglo pasado el primer cine de Hurlingham, y el escenario externo que daba al playón recibió a los más populares artistas de las décadas del 50 y del 60, en memorables fiestas de carnaval con el Club del Clan de Palito Ortega por ejemplo. Luego, ya en los 70 y hasta entrados los años 80, ese playón fue la primer cancha de «baby futbol» en la zona (mucho antes que proliferaran las canchas de papi o futbol 5 con césped sintético).
En el Cosmopolita se constituyó la Comisión Pro Autonomía de Hurlingham, también funcionó en sus instalaciones un taller protegido para discapacitados. En los 90 se formó el Centro de Jubilados y Pensionados y fue sede de la Federación de Centros de Jubilados.
Con la autonomía de Hurlingham, y antes de la creación de Centro Cultural Marechal en Villa Tesei, el Cosmopolita era el centro cultural que el municipio utilizaba para sus eventos. Son recordadas, por ejemplo, las presentaciones exclusivas y gratuitas para jubilados de Alfredo Alcón, del elenco del Teatro Cervantes con Claudio Gaillardou o recitales como el de Santiago Feliú. La historia y la comunidad de Hurlingham merecen la puesta en valor de un sitio emblemático como es el Cosmopolita. Su historia es la historia misma de la ciudad.
Fui anoche a ver el espectáculo a la gorra y creo q se podía traer más obras . Sería lindo tener un teatro como ituzaingo