DERRUMBE DEL ACUÑISMO
El candidato del Frente para la Victoria, Juan Zabaleta obtuvo un categórico triunfo en las PASO, superando por 15 puntos al intendente massista Luis Acuña que quedó segundo, apenas por un punto y medio de ventaja del Frente Cambiemos en el que confluyó el PRO y la UCR.
Todas las encuestas anticipaban una victoria de Juan Zabaleta frente a Luis Acuña. Y algunos observaban que el jefe comunal podría quedar tercero, detrás del candidato del PRO, Lucas Delfino. Así las cosas, no hubo sorpresas en las elecciones primarias desarrolladas en Hurlingham.
Juan Zabaleta rozó el 40% de los votos y Acuña apenas superó el 25%, mientras que el Frente Cambiemos estuvo cerca del 24%. El resultado no fue sorpresivo, salvo para el acuñismo que, si bien en la intimidad sabía que la derrota era una posibilidad cercana, no pensaron que esos iban a ser los números.
La desazón en el oficialismo local fue absoluta. Una de las pocas declaraciones públicas que hizo Luis Acuña fue a través de twitter, y usó la red social para avisar que no se bajaba de la candidatura a intendente. Una advertencia innecesaria, salvo que alguien del entorno acuñista lo haya pensado. La declaración marca el estado de ánimo del jefe comunal, que le estará resultando muy difícil dilucidar de qué modo puede revertir ese rechazo de la ciudadanía en las urnas.
Lo que sí es seguro, que le esperan a Luis Acuña 75 días de mucha angustia. 75 son los días que faltan para las elecciones generales. Serán días que le resultarán eternos a toda la plana mayor de la municipalidad.
Mientras tanto algunos de los militantes del massismo ya están buscando el modo de tender puentes con el Frente para la Victoria. “Muchachos, tengamos la tarde en paz, ustedes van a ganar, ya lo sabemos, que cada uno haga su laburo tranqui y nos vamos temprano”. La frase la dijo un fiscal general del Frente Renovador a uno del Frente para la Victoria, en una escuela en Villa Tesei. Eran las 10 y media de la mañana del domingo 9 de agosto. La confesión de ese militante acuñista, representaba más que cualquier boca de urna.
Finalmente, toda la jornada de los comicios se desarrolló con absoluta tranquilidad. No hubo reporte de ningún inconveniente, de ningún desmán. Hubo los clásicos de todas las elecciones, como las denuncias por robo de boletas, de casi imposible comprobación.
El porcentaje de asistentes a las urnas estuvo dentro de lo previsible, más del 76% y hubo más de 11 mil votos en blanco.
Como ocurriera en todo el país, el recuento fue muy lento. Pasadas las 10 de la noche no había demasiados datos, pero desde temprano, todo indicaba que Juan Zabaleta se estaba perfilando firmemente al triunfo. Un poco más de las 9 de la noche, el primer candidato a concejal del FPV, Martín Rodríguez, dijo a FM BLOG: “Somos muy cautelosos, pero no podemos ser hipócritas. Ya veníamos sintiendo el apoyo de los vecinos y ahora nos estamos preparando para festejar”, expresó el dirigente de La Cámpora.
Si estos resultados se repitieran en octubre, Juan Zabaleta sería el próximo intendente y sumaría 5 concejales, contra 3 del acuñismo y dos del PRO.