Lucas Delfino quiere ser candidato a concejal otra vez

 Lucas despacho 2

Por Raúl Coria.

Lucas Delfino es Subsecretario de Políticas Municipales de la Nación, fue candidato a intendente por el PRO, perdió contra Juan Zabaleta pero superó a Luis Acuña, que buscaba su reelección  como intendente. Ahora con cargo en el gobierno nacional no quiere perder terreno político en Hurlingham, y prevé volver a ser candidato en el 2017.

-Los últimos meses fueron de mucho vértigo. De ser el segundo candidato más votado en Hurlingham a ser funcionario del gobierno nacional, todo muy rápido…

-La verdad es que teníamos toda la expectativa para asumir como intendente de Hurlingham, porque trabajamos muchísimo para eso. Hicimos una campaña muy austera pero logramos un gran resultado. Logramos romper la polarización entre el intendente Luis Acuña y el candidato del Frente para la Victoria Juan Zabaleta, y estuvimos mucho más cerca de ganar de lo que todos pensaban.

Pero no ganamos y después superamos ese trago amargo, con la satisfacción de que María Eugenia Vidal sea la gobernadora electa y posteriormente, el balotaje le dio la victoria a Mauricio Macri en la Nación.

A principio ya habíamos charlado sobre la posibilidad de colaborar en el gobierno provincial, María Eugenia me había convocado para que la acompañe en la gobernación, pero como yo vengo trabajando con Rogelio Frigerio y él creía que yo podría cumplir un mejor rol trabajando en el proyecto nacional, me sumé al Ministerio del Interior. Y asumí este cargo con orgullo, con muchas ganas, muchas expectativas y hoy lo que estamos haciendo es articular al Estado Nacional con los dos mil doscientos municipios que hay en todo el país, teniendo en cuenta que es un país muy heterogéneo y que eso es lo que nos hace mucho más ricos y pensando en un Estado diferente desde los márgenes hacia adentro, como lo planteó el Papa Francisco en alguna oportunidad, y es muy interesante entender las diferentes problemáticas, esto es, ir a los municipios a escuchar para ver que políticas podemos llevar a delante y no diagramar las políticas desde acá y querer después aplicar un mismo método en todos lados.

-¿Y cómo fueron estos primeros meses de funcionario nacional?

-Fueron tres meses de un aprendizaje muy grande, pudimos ordenar la estructura burocrática administrativa, la secretaria casi no venía funcionando, ahora el Ministerio del Interior tomó un nuevo rol, muchísimo más político, recuperando lo que era el Ministerio del Interior en el pasado, porque (Florencio) Randazzo sin duda fue un buen ministro pero de DNI y de transportes, no era un ministro político y ahora vemos como está encima de la mesa, el debate sobre federalismo y la importancia de los municipios, ahora es asiduo que los gobernadores visiten la casa rosada más allá de su color político y producto de eso logramos un primer hecho muy interesante que fue por primera vez en la historia que el presidente almuerce con los 24 intendentes de las capitales. Me tocó armar y coordinar esta iniciativa y creo que fue interesante escuchar y tener en cuenta, entender que los  intendentes son los que están en la primer trinchera, son los que tiene de primera mano los reclamos de la gente, y el presidente en una actitud muy humilde y muy centrado dijo “yo no tengo problemas en ratificar alguna política si tiene un impacto que nosotros no lo tenemos en cuenta ya sea en Ushuaia o en Salta” y así se fue dando. Ahora estamos llevando lo que es Estado Nacional al interior, ya hicimos siete reuniones en esto que nosotros llamamos Red Territorial o Foro de Intendentes donde vamos a la capital de las provincias y convocamos a todos los intendentes. Esto ya lo hicimos en Salta, Chaco, Catamarca y ahora la semana próxima lo hacemos en Chubut, entonces vienen todos los intendentes y nosotros llevamos diferentes áreas de gobierno y esto los nuclea la Secretaría de Municipios de la que yo estoy a cargo y llevamos de acuerdo a las demandas de cada provincia, las áreas de educación, producción, la parte de modernización y ahora estamos llevando medio ambiente, porque en Chubut hay un problema de residuos sólidos, todo esto para explicarles hacia dónde va la política del Estado Nacional. Pero como te decía, el objetivo es escucharlos y ver de qué manera podemos hacer una mejor política.

-Hablaba de aprendizaje, evidentemente está encontrando un mundo que le era desconocido…

-Es espectacular, tanto en lo profesional, en lo político y en lo humano. También uno al hacer política en la provincia de Buenos Aires tiene un estereotipo de intendente que dista mucho del intendente promedio de Catamarca, de la Rioja, de Salta, donde hemos tenido historias muy conmovedoras y que realmente revaloriza la política y revaloriza el sentido de servicio público. Tuvimos una reunión de intendentes de Catamarca en la Casa Rosada donde hicieron pull y se vinieron cinco intendentes en un solo auto… ¡Desde Catamarca!. Tardaron un día y medio porque no tenían recursos para venir; o un intendente se San Luis que asumió en un lugar que hacia veinte años estaba otro intendente, y me contó que las rajaduras de la intendencia eran tan grandes que pasaba el sol y que no le habían dejado ni una pala, y me dijo ‘yo podía renunciar e irme a mi casa o tratar de sacarlo adelante’, y lo que hizo fue convocar a todo el pueblo, que es un pueblo muy chico de ochocientos habitantes, y él dijo que todas las tardes él se iba a poner a trabajar y logró que sesenta o setenta vecinos todas las tardes al terminar su labor le den una mano y pongan hasta sus propias herramientas y así recuperó la pileta municipal, el edificio, comenzaron a hacer obras con los vecinos y los pocos funcionarios que tenía el municipio. Estas son las realidades de nuestro país. Si nosotros acá no entendemos que tiene que haber municipios sustentables, autónomos, que tenga las cuentas en orden, que las provincias sean responsables y que la Nación sea quien coordine, esto no va a salir adelante. Tenemos que entender la complejidad de esto, te pongo otro ejemplo extremo, el intendente de Caleta Olivia, que es el equivalente a La Matanza de Santa Cruz, me muestra que el intendente anterior del Frente para la Victoria recibía 28 millones de pesos por mes en ATN para pagar sueldos, y me vino a preguntar cuando le íbamos a girar esa plata nosotros, y lo que le planteamos es que nosotros estamos para colaborar y para tratar de solucionar problemas estructurales pero no vamos a financiar un desmadre así en un pueblo como Caleta que tiene 90 mil habitantes y que tenga seis mil empleados municipales y tres mil quinientos cooperativistas, porque hay que hacerlo ordenado y sustentable, porque en lo que tenemos que poner el eje es en la generación de trabajo genuino sino esto no lo solucionamos más.

-Y en cuanto a Hurlingham, ¿este trabajo le sirve para ver su futuro político desde otra perspectiva?

-El otro día charlaba en un evento con respecto a las posibilidades de algunos cargos legislativos provinciales y nacionales, básicamente por la exposición que estoy teniendo y la verdad es que la vocación que tengo es de ayudar a Hurlingham y que sea diferente. Creo que hoy, conociendo muchísimo más y teniendo más herramientas y abriendo mucho la cabeza, estoy convencido de la necesidad de armar para lograr buenos resultados. Veo experiencias de otros lugares de la Argentina, y acá mismo, en Asuntos Municipales, contamos con equipos del BID -que financian programas estratégicos-, hemos armado un equipo con gente de diferentes provincias y diferentes espacios políticos, del radicalismo, el peronismo o con perfiles más técnicos y viendo la política desde un lugar mucho más macro, hoy entendiendo que esto no lo soluciona una sola persona sino que hay que armar grandes equipos y con eso me estoy llevando muchos compromisos para dentro de tres años formar el gabinete de Hurlingham con gente que creo muy valiosa.

-¿Pero previamente está evaluando presentarse como candidato a concejal?

-Si desde el grupo de Hurlingham consideran que donde más puedo colaborar es encabezando la lista de concejales así lo haré, pero obviamente estoy atado a lo que diga el presidente Mauricio Macri y la gobernadora Vidal, el mismo Frigerio, porque en eso soy muy orgánico. Voy a estar donde pueda dar una mano, yo no hago política por los cargos públicos, ahora que me toca estar en un rol muy importante y lo hago con una gran vocación, me apasiona el estudio de la política y el ejercicio de la política, y en ese sentido creo que hoy para poder colaborar con María Eugenia y con Mauricio puedo hacerlo desde Hurlingham, obviamente atado a ver cuál es la idea de ellos. La verdad es que nunca me alejo mucho de Hurlingham. Trato de tener la cotidianeidad que me da vivir en el distrito aunque hoy con todos los viajes que tengo se me hace un poco difícil. La semana pasada estuvimos con los operativos de DNI, la semana anterior estuvimos recorriendo escuelas por el inicio del ciclo lectivo, vamos a estar con actividades en clubes y sociedades de fomento. Estas actividades se suman a las que diariamente hacen Alfredo (Carrasco) y Pablo (Sivori), con los que estoy en contacto permanente, junto a ellos estamos tratando de llevar a Hurlingham, todas las herramientas del Estado Nacional y estar a disposición de los vecinos y ahora también con las nuevas designaciones de Andrea Giorgini en Anses y Sebastián Palacio en el Pami.

-¿Los funcionarios del Anses y del PAMI de Hurlingham son parte de tu espacio político?

Son parte de un mismo equipo, obviamente están en un rol técnico y tienen que cumplir su función, pero sin dudas son parte de un mismo equipo. La idea es estar al servicio de todos los vecinos de Hurlingham, por eso pusimos gente idónea, los dos son abogados, Andrea es abogada previsionalista que viene trabajando desde hace mucho tiempo en el tema y Sebastián viene trabajando hace cinco años en la Sindicatura de la Ciudad como abogado, son perfiles muy idóneos para brindar un buen servicio para los vecinos de Hurlingham.

-¿Cómo ve la nueva conformación del Concejo Deliberante?

Es muy interesante,  siempre y cuando se dé el ámbito para el debate y eso tenga impacto real en la vida de los vecinos. Si se aprueba una ordenanza en la cual se plantea que por 90 días no tiene vigencias las vías de excepción para las construcciones pero después no se cumple, creo que vuelve ese Concejo Deliberante que nadie quiere. Una cáscara vacía donde se debate mucho pero no tiene implicancia real en la vida de los vecinos.

-¿A qué se refiere concretamente?

-No lo digo yo, los vecinos que recorren muchas de las obras dicen que es evidente que siguen las construcciones en altura. Todos sabemos que el Código de Ordenamiento Urbano es muy viejo y que lamentablemente no se ha podido modificar, creo que, y planto la duda, es muy interesante el momento y me parece que sería muy enriquecedor para el intendente dar los espacios en el Concejo Deliberante para que realmente se debatan los temas que después se lleven adelante. Creo que el tema del Código de Ordenamiento Urbano es un planteo que nosotros venimos proponiendo desde hace por lo menos tres años, pero hay que darlo de una forma seria, hay que convocar a todos, porque es algo que va a modificar a futuro toda nuestra ciudad, bueno hay que dar el debate real.

-Y en general ¿qué análisis hace de los primeros meses de gestión del gobierno municipal?

-Creo que fuimos muy respetuosos durante estos tres meses y estuvimos al margen de opinar y dimos la gobernabilidad que necesitaban, porque el Frente Renovador no quería que la presidencia en el Concejo Deliberante esté en manos del Frente para la Victoria y yo en eso soy muy ordenado y creo que el intendente tiene que tener la presidencia del Concejo, como también creía que María Eugenia tenía que tener la posibilidad de tener un presupuesto acorde para afrontar el desastre en la provincia que le habían dejado. Por eso acompañamos desde lo institucional, por eso fuimos muy respetuosos, pero hoy realmente el manto es de preocupación porque creo que hay más medidas cosméticas que de fondo, vemos mucho verde en Hurlingham y mucha inauguración pero pocos temas de fondo. Lo veo recorriendo todas las semanas, cuando estoy. Creo que es un tiempo acotado pero en general las señales que veo me preocupan.

-En el plano nacional, en estos días se concretó el aumento de tarifas en el transporte público y la quita, en algunos casos, de los subsidios que servían para evitar el alto costo del transporte, ¿cuál es su visión al respecto?

El Presidente nos recuerda para quienes gobernamos, para los pobres que son los que menos tienen. Combatir la inflación y  generar trabajo, genuino de buenos salarios y que genere riqueza. Tenemos que llegar al equilibrio fiscal, la responsabilidad de la inflación del Estado es que no ha podido tener equilibrio en las cuentas públicas. Esto provocó una caída del salario. Tenemos que reconocer la inflación y atacar las causas. No lo vamos a hacer de un día para el otro. La historia nos enseñó que hay que trabajar con una política gradual y que a los sectores vulnerables son los que más hay que cuidar. Implica bajar los subsidios económicos a las empresas y tratar de ir con los subsidios para los que más necesita. Detrás de cada política pública hay  sectores de la sociedad que hay que cuidar. Fuimos a mejorar la situación de las economías regionales y las primeras políticas que implementamos fueron para ellos, y esas no son políticas para ricos sino para los sectores más vulnerables. Aumentamos al 160 por ciento para subir el impuesto a las ganancias. Y todavía nos quedan muchas leyes para llegar al objetivo de la pobreza cero.

-Pero producto de todas estas medidas el estado de ánimo de la gente a empeoró, ¿cómo analiza esto?

-Va a depender de lo que hagamos y de los éxitos que vayamos teniendo al camino de una economía normal y pobreza cero. La gente no quiere que le mientan más, ellos prefieren saber la verdad, la inflación, el desempleo, la relación con el mundo. La verdad implica que no se pueden sostener las tarifas que se pagaban en la Argentina. Primero porque eran subsidios para todos, no discriminaba a ricos de pobres y además estábamos en un país unitario y tenemos que construir un país federal. Un colectivo a 3 pesos en Buenos Aires y a 9 pesos en Bahía Blanca. Un país más equilibrado, equitativo, eso implica tomar medidas que son antipáticas pero hay que hacerlas pensando en los que menos tienen. Va a haber subsidios en el transporte para los que reciben asignaciones, jubilados, pensionados, discapacitados para que paguen una tarifa menor, un 10 por ciento menos. El resto para una tarifa mayor. El periodo populista que pasó y duró  como nunca 12 años porque hemos tenidos variables exógenas en Argentina. Nunca el costo del capital fue tan barato en el mundo y eso generó condiciones para este populismo que duró muchos años. Estos generó beneficio para un sector de la sociedad que querremos sostener. Pero estamos planteando nuevas medidas.

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